Los primeros años 50 fueron tiempos dorados para el deporte en Hungría, a pesar del terrible sufrimiento del país durante la Segunda Guerra Mundial y los años posteriores como satélite de la Unión Soviética. El Honved de Budapest, el equipo de fútbol del Ejército, base del potente equipo nacional húngaro, estaba considerada la mejor escuadra del mundo. Paralelamente surgieron un grupo de mediofondistas que pronto se encaramaron en la élite: Sándor Iharos (1930-1996), István Rózsavölgyi (1929-2012), László Tábori (1931-2018) y József Kóvacs (1926-1987) sorprendieron al mundo atlético conquistando los primeros puestos en las listas de todos los tiempos de aquel momento. Los tres primeros estaban dirigidos por la sabia mano de Mihály Iglói (1908-1998). De entre ellos, destacó sobremanera Iharos, que en 1955 superó seis plusmarcas mundiales, y otras dos más en 1956. Sigue siendo el único atleta, junto con el finlandés Paavo Nurmi (1897-1973), plusmarquista mundial de 1500, 3000, 5000 y 10 000 m, si bien, a diferencia de Nurmi, no poseyó todas las plusmarcas simultáneamente. Desgraciadamente las peculiares circunstancias políticas de Hungría rompieron esta edad de oro deportiva. Hay una excelente entrada en el blog de Daniel Ceán Bermúdez sobre este tema.
Sándor Iharos (Iharos Sándor en el original húngaro) nació como Sándor Izrael el 10 de marzo de 1930 en Budapest. No conoció a su padre. Su madre y su familia materna se encargaron de su educación. Comenzó a trabajar de aprendiz en una fábrica a los 18 años. Un año más tarde, tras haber recibido unas zapatillas deportivas como regalo, empezó a practicar atletismo. En 1951 inició el servicio militar, entonces obligatorio, donde conoció a Mihály Iglói, que era entrenador del Ejército. Iglói había sido él mismo atleta, primero saltador de pértiga, mientras estudiaba Educación Física en la Universidad de Budapest, pero se pasó al mediofondo. Su referencia atlética de entonces era el polaco Janusz Kusociński (1907-1940), campeón olímpico de 10 000 m en una época de absoluto dominio finlandés. Iglói adaptó para sí mismo el método del polaco, basado en un volumen alto, junto con series de alta intensidad y recuperación corta. Este entrenamiento le sirvió para ser olímpico en 1936 en 1500 m, distancia en la que registró un mejor tiempo de 3:52.2. Posteriormente continuó con este método como entrenador. Iharos había corrido previamente los 1500 m en 4:06.8. Tras unos meses con Iglói mejoró a 3:54.2 y fue segundo en el campeonato nacional. Iharos se quedaría varios años en el Ejército como instructor de deportes. Llegó al grado de capitán.
En 1952 progresó hasta 3:49.4, lo que le valió la selección olímpica, si bien no pudo superar la primera ronda. En 1953 fue bronce en la Universiada. A finales de ese año se unirían a su grupo de entrenamiento otros dos corredores que acabarían estando entre los mejores, István Rózsavölgyi y Lázsló Tábori. El 14 de julio de 1954 estos dos, junto con Iharos y el antiguo remero Ferenc Mikes superaron con 15:21.2 la plusmarca mundial del relevo 4 x 1500 m. Poco después, el 3 de agosto, Iharos, en un encuentro Noruega – Hungría a dos, celebrado en Oslo, corría los 1500 m en 3:42.4, nueva plusmarca europea. Sin embargo, su rendimiento en el Campeonato de Europa, no cumplió las expectativas. Fue sexto en la final del 29 de agosto, con 3:47.0, a 3.2 del ganador, el británico Roger Bannister (1929-2018), el primer atleta en correr la milla por debajo de los 4 minutos. Poco después realizó 7:59.6 en 3000 m, a 0.9 de la plusmarca mundial del belga Gaston Reiff (1921-1992). También mejoró en 5000 m hasta 14:12.2.
La temporada de 1954 tuvo para Iharos, sin duda, un sabor agridulce. Su progresión cronométrica no se vio refrendada con una actuación acorde en el campeonato de Europa. En cualquier caso, nada hacía prever su sobresaliente rendimiento de 1955, año en que superó oficialmente siete plusmarcas mundiales. El 14 de mayo, en Budapest, corría los 3000 m en 7:55.6. El 30 de mayo, en Londres, hacía 8:33.4, 7.0 menos que Gaston Reiff. El 28 de julio, en Helsinki, registraba 3:40.8 en los 1500 m, mejorando en 1.0 al australiano John Landy (1930). El 10 de septiembre en Budapest superaba por 0.4 los 13:51.2 que el ucraniano Vladimir Kuts (1927-1975) tenía como plusmarca mundial de 5000 m. Kuts recuperaría el primado mundial ocho días después con 13:46.8. Pero Iharos contraatacó con éxito en la misma Budapest el 23 de octubre, 13:40.6, con 2:33.6 el último kilómetro y 59.6 la última vuelta. El paso por las 3 millas en 13:14.2 fue también plusmarca mundial. Unas semanas antes, el 29 de septiembre, nuevamente en su ciudad natal, rebajaba, con sus mismos tres compañeros, el tope mundial de los relevos 4 x 1500 m a 15:14.8.
En 1956 se celebraban los Juegos Olímpicos en Melbourne. Con su rendimiento del año anterior, Iharos se había convertido en uno de los candidatos a medalla. El 19 de junio perdió la plusmarca mundial de 5000 m a manos del británico Gordon Pirie (1931-1991), con 13:36.8, que derrotó a Kuts por 2.8. El 15 de julio en Budapest, Iharos superaba la plusmarca mundial del checo Emile Zátopek (1922-2000) de 10 000 m por 11.4, con 28:42.8. El paso de 27:43.8 por las 6 millas también fue plusmarca mundial. Era el segundo 10 000 de Iharos. Había corrido una prueba en 1952 en 33:04.4. Su registro se mantuvo menos de dos meses en lo más alto. El 11 de septiembre Kuts realizaba 28:30.4. Iharos también perdió la plusmarca mundial de 1500 m, a manos de su compatriota Rózsavölgyi, que el 3 de agosto recortó 0.2, con 3:40.6. Finalmente el 4 de septiembre, Iharos fue testigo de la pérdida de su primado mundial en los 3000 m. En Mälmo, Pirie derrotó al trío húngaro con 7:52.8, delante de Rózsavölgyi, 7:53.4, y con Iharos tercero con unos pobres 8:05.8. Tábori fue cuarto. No obstante, Iharos corrió tres días después un 5000 muy rápido en 13:46.6. Pese a haber perdido sus cuatro plusmarcas mundiales en las distancias métricas, parecía uno de los hombres fuertes para los Juegos. Las circunstancias, sin embargo, no fueron favorables a los húngaros. En octubre, un nuevo gobierno en Budapest había decidido, tras numerosas manifestaciones en la calle de sus ciudadanos, hacer reformas en el seno del régimen comunista. Tras un enconado debate entre los miembros de su gobierno, la Unión Soviética decidió que no aceptaba la decisión de los húngaros e invadió el país el 4 de noviembre. Iglói, Tábori y Rózsavölgyi llegaron a viajar a Melbourne, donde los atletas, afectados por la situación de su país, tuvieron un rendimiento inferior al esperado. Tabori fue cuarto en 1500 y sexto en 5000 m, mientras su compañero no pasaba de la primera ronda en los 1500 m. Al que no pareció afectarle la situación de su país fue a József Kóvacs, plata en 10 000 m, tras el inabordable Kuts. Iharos, lesionado en un tobillo y con problemas familiares, no acudió a los Juegos pero huyó del país.
Tras los Juegos Rózsavölgyi volvió a Hungría. Iglói y Tábori optaron por emigrar a los Estados Unidos, donde el primero continuó con su exitosa trayectoria como entrenador. Sus dos discípulos más destacados en su etapa americana fueron Jim Beatty (1934), primer atleta en correr la milla en sala en menos de 4 minutos, y Bob Schul (1937), campeón olímpico de 5000 m en 1964). En 1969 se trasladó a Grecia, donde siguió ejerciendo como entrenador hasta su jubilación. Tras su retirada volvió a Budapest. Por su parte, Iharos regresó a Hungría en 1957, abandonó el Ejército, y retomó el atletismo, pero sin Iglói las cosas no volvieron a ser iguales. Su rendimiento se quedó muy lejos del mostrado en 1955 y 1956. En 1958 fue sexto en el 5000 del campeonato de Europa, con 14:07.2, muy lejos de los 13:53.4 del campeón, el polaco Zdzisław Krzyszkowiak (1929-2003). No le fue mejor en los Juegos Olímpicos de 1960, donde ocupó la 10ª posición en los 5000 m y 11ª en los 10 000 m. Aun en 1959, tuvo la oportunidad de recordar viejos tiempos cuando el 29 de septiembre, en Budapest, junto con Lajos Kóvacs (1936-1997), Béla Szekeres (1938-2000) y Rózsavölgyi, superó la plusmarca mundial de relevo 4 x 1 milla con 16:25.2. Siguió compitiendo hasta 1962. Tras su retirada trabajó como entrenador y posteriormente en una fábrica de construcción, fue comercial, camarero y empleado en una gasolinera. Cada vez más recluido y con problemas de alcoholismo, falleció el 24 de enero de 1996, a los 65 años.
Sándor Iharos fue un excepcional atleta, al que le tocaron vivir circunstancias muy complicadas y que no tuvo una segunda oportunidad en al alta competición, tras su discreta actuación en el Europeo de 1954. Después de la invasión de su país y la huida de su entrenador, ya no volvió a ser el mismo. No lo habría tenido nada fácil, en cualquier caso, ante Vladimir Kuts, que llegó pletórico a los Juegos de 1956 y se llevó los dos oros de las pruebas de fondo en pista. Desde entonces no ha habido ningún atleta capaz de aunar las plusmarcas mundiales de 1500, 5000 y 10 000 m.
Las plusmarcas mundiales de Sándor Iharos
4 x 1500 m 15:21.2 Budapest 14 07 1954
3000 m 7:55.6 Budapest 14 05 1955
2 milas 8:33.4 Londres 30 05 1955
1500 m 3:40.8 Helsinki 28 07 1955
5000 m 13:50.8 Budapest 10 09 1955
4 x 1500 m 15:14.8 Budapest 29 09 1955
3 millas 13:14.2+ Budapest 23 10 1955
5000 m 13:40.6 Budapest 23 10 1955
6 millas 27:43.8+ Budapest 15 07 1956
10 000 m 28:42.8 Budapest 15 07 1956
4 x 1 milla 16:25.2 Budapest 29 09 1959
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