No han sido el atletismo en particular y el deporte en general temas demasiado tratados en la cinematografía. De 1910 a 2018, el deporte no figura entre los doce géneros cinematográficos más prevalentes en Hollywood. Hay alguna excepción, como El orgullo de los yanquis (Sam Wood, 1942), sobre la vida del jugador de beisbol Lou Gehring (1903-1941), malograda por la esclerosis lateral amiotrófica, o la aclamada Carros de fuego (Hugh Hudson, 1981), sobre los atletas británicos en los Juegos Olímpicos de 1924. En el mundo de las series de TV el panorama es similar, incluso en la época actual de explosión de las plataformas de entretenimiento. Pero, en medio de tanta oferta, siempre hay la posibilidad de encontrar algo, aunque hubiese pasado desapercibido. En este sentido hay una serie, que se puede ver en YouTube, ya de 1984, muy recomendable para los aficionados al atletismo, Los primeros Juegos Olímpicos. Atenas 1896 (The First Olympics. Athens 1896), en ocasiones mal traducida por confundir Olympics (Juegos Olímpicos) con Olympiad (Olimpíada).
La cinta constituye una miniserie de dos episodios, con una duración de total de 3 horas 57 minutos, dirigida por el canadiense Alvin Rakoff (1927) con guion de Charles Gary Anderson (1938-2008). Cuenta los avatares de los inicios de los Juegos Olímpicos de la era moderna, centrándose principalmente en el equipo estadounidense de atletismo. En 1894, en París, bajos los auspicios del aristócrata francés Pierre de Coubertin (1863-1937), se fundó el Comité Olímpico Internacional. La idea de Coubertin era resucitar los antiguos Juegos Olímpicos y propuso organizar una competición multideportiva en Atenas entre el 6 y el 15 de abril de 1896. Su propuesta se aceptó y en los dos años siguientes el francés se afanó en tratar que los países más potentes deportivamente tomasen parte en la nueva competición. En aquella época de Coubertin contaba con poco más de 30 años. En la serie, sin embargo, está interpretado por el entonces sexagenario actor francés Louis Jourdan (1921-2015), que había hecho una brillante carrera en Hollywood con títulos como El proceso Paradine (Alfred Hitchcock, 1947) o Gigi (Vicente Minelli, 1958). En un gran papel, Jourdan da al personaje el porte aristocrático que se merece. Un hombre clave para el éxito de estos primeros Juegos es el profesor de Historia de Princeton, William Milligan Sloane (1850-1928), interpretado por David Ogen Stiers (1942-2018). Sloane respondió de forma entusiasta a la idea de revivir los Juegos Olímpicos. En 1895 fundó el Comité Olímpico de Estados Unidos y fue clave para que su país tomase parte en la primera edición. Tuvo que buscar deportistas y entrenadores dispuestos a ir a los Juegos, y también la financiación, pues no obtuvo ayudas públicas. Su granero fueron las universidades, donde ya había programas deportivos, si bien no todos los dirigentes universitarios estaban de acuerdo con esto.
La serie comienza con tres escenas, en tres países diferentes, de tres futuros campeones olímpicos. Robert Garrett (1875-1961) en Estados Unidos, interpretado por Hunt Block (1954), que ganaría el lanzamiento de disco y el lanzamiento de peso. Spiridon Louis (1873-1940) en Grecia, interpretado por Nicos Thiagos, que ganaría el maratón. Y Edwin Flack (1873-1935) de Australia, interpretado por Benedict Taylor (1960), que se llevaría una doble victoria en 800 y 1500 m. Aunque a estos primeros Juegos no fueron los mejores deportistas, la incansable labor del Dr Sloane hizo que Estados Unidos llevase a Atenas un sólido equipo. No solo tuvo que buscar atletas, sino también entrenadores. Su principal apoyo técnico fue John Graham, interpretado por Edward Wiley (1955), entrenador universitario, en gran parte autodidacta en atletismo. Finalmente, se envió a Atenas un equipo de catorce deportistas, la mayoría estudiantes en Harvard y Princeton o miembros del club Boston Athletics. Compitieron mayormente en atletismo, si bien hubo también un representante en natación y tres en tiro olímpico. Doce de estos catorce deportistas quedaron entre los tres primeros. En atletismo, con once representantes y solo un campeón nacional, el triplista James Connolly (1868-1957), se llevaron nueve victorias en doce pruebas, seis segundos y dos terceros puestos. Aunque en la serie los tres primeros atletas reciben premios, en realidad solo se premiaban al ganador y al segundo, con una medalla de plata y una de cobre respectivamente. El COI retroactivamente concedió medallas de oro, plata y bronce a los tres primeros.
Aunque, como se señaló anteriormente, algunas universidades de entonces tenían programas deportivos, no siempre sus dirigentes tenían un alto concepto del deporte. James Connolly, estudiante de Harvard, ganador de triple salto y primer campeón olímpico moderno, no obtuvo permiso de su universidad para ir a los Juegos, pero decidió acudir de todos modos. Eso le costó la expulsión. En la serie está interpretado por David Caruso (1956), que años más tarde se haría mundialmente famoso con el personaje del teniente Horatio Caine en la serie CSI Miami. Tras una travesía desde Nueva York de más de dos semanas, los atletas estadounidenses llegaban a Atenas, con algunos problemas, pues Grecia no había adoptado el calendario gregoriano y las fechas oficiales de los Juegos tenían un adelanto de doce días, que los estadounidenses ignoraban.
La serie hace una gran recreación del estadio Panathinaikó, con capacidad para 80 000 espectadores, reconstruido en el lugar del antiguo estadio que había albergado en la Antigüedad los Juegos Panateneos. La dureza de las pistas y el ángulo cerrado de las curvas hizo que los registros no fuesen buenos. El estadounidense Thomas Burke (1875-1929), interpretado por Hutton Cobb, fue campeón de 100 y de 400 m, con 12.0 y 54.2 respectivamente. Él mismo acreditaba 11.2 y 48.5. Las plusmarcas mundiales oficiosas de entonces eran 10.8 y 48.5, esta en 440 yardas (402.34 m). En atletismo, solo masculino, se programaron doce pruebas, 100 m, 400 m, 800 m, 1500 m, maratón, 110 m vallas, salto de longitud, triple salto, salto de altura, salto con pértiga, lanzamiento de disco y lanzamiento de peso. En la serie se representan con un notable realismo las doce pruebas, además de unas breves escenas del tiro olímpico y la natación con participación estadounidense. Los atletas estadounidenses solo dejaron de ganar los 800, los 1500 m y el maratón. En la ceremonia de inauguración hay dos notables anacronismos. El desfile de los países participantes, que en estos Juegos fueron catorce, no tuvo lugar hasta los Juegos de 1908, si bien en los llamados Juegos Intercalados de Atenas de 1906, no reconocidos por el COI, ya se había organizado. Por otro lado, Australia, que figura como país, no adquirió su entidad nacional hasta 1901. Previamente estaba formada por seis colonias británicas gobernadas de forma independiente.
La especialización de los atletas era entonces más laxa. Robert Garrett ganó el disco y el peso y fue plata en los saltos de longitud y altura, plata esta compartida con el campeón de triple James Connolly, que fue también bronce y longitud. Ellery Clark (1874-1949), interpretado por Ian Morton, ganó los saltos de altura y longitud. Robert Garrett no participó, como muestra la serie, en el maratón. Sí lo hicieron Edwin Flack, tras sus victorias en 800 y 1500 m, y el estadounidense Arthur Blake (1872-1944), interpretado por Alex Hyde-Blake (1959), que fue segundo en 1500 m, pero no en 800, como muestra la serie, prueba en la que no tomó parte. Ninguno de los dos terminó el maratón. Esta carrera se disputó desde la llanura donde tuvo lugar la batalla de Maratón en 490 a C hasta Atenas, en conmemoración del logro del soldado Filípides, que recorrió los aproximadamente 40 Km de distancia a Atenas para anunciar la victoria de los suyos sobre los persas. La idea partió del filólogo francés Michel Bréal (1832-1915), amigo de Coubertin. El primer maratón olímpico fue la apoteosis griega, con la victoria del pastor Spiridon Louis, que se convirtió en un héroe nacional. El entrenador estadounidense John Graham se quedó tan impresionado con la prueba que al año siguiente fundó el maratón de Boston, que hoy es uno de los grandes.
Los primeros Juegos Olímpicos fueron un éxito, a lo que sin duda contribuyó la presencia de los estadounidenses y permitió que el movimiento olímpico continuase, con altibajos, hasta consolidarse como el acontecimiento deportivo más importante del planeta.
Esta serie muy recomendable se puede ver en YouTube en dos partes, la primera en versión original sin subtítulos y la segunda en versión original con subtítulos en inglés autogenerados.
Esta lista de Internet Movie Database (IMDB) contiene 41 películas o series de temática olímpica. Próximamente habrá una entrada sobre The four-minute mile, que también se puede ver en YouTube.
Ángel, una excelente entrada.
En temas cinefilo en el atletismo da un poco de juego, nuestro amigo Mejino, me pasó hace mucho tiempo una película sobre una historia de un lanzador de martillo irlandés.
No recuerdo ahora el nombre, la película era un poco rollo.
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Como cuento en la entrada, en el mundo del cine/series hay muy poco de atletismo. Al final incluyo un enlace con películas/series de temática olímpica. Excluyendo los documentales, el atletismo es escasísimo. Esta de Atenas es francamente buena. Es una lástima que no tenga subtítulos en español. En cuanto a la película que tú me dices, la desconozco. De cine/series de atletismo solo he visto, además de esta, por supuesto Carros de fuego, The four minute mile y El corredor valiente. Vi a trozos Sin límites, pero no me gustó especialmente.
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